A pesar de que la fotografía de paisajes pueda parecerte algo muy sencillo, esta muy lejos de serlo. Convertirse o ser fotógrafo de paisajes es una de las disciplinas más difíciles de dominar. Cualquiera puede obtener una gran fotografía de un paisaje majestuoso, pero llegar a ser un fotógrafo sin igual no es para cualquiera, y es un camino que deberás transitar de a poco, con erres y aciertos que te harán aprender de qué va todo esto.
Por esta razón, en la clase de hoy charlaré contigo acerca de algunos errores frecuentes en fotografía de paisajes, y por supuesto, también te enseñaré cómo puedes solucionarlo para que estés tranquilo y no te quedes con la intriga 🙂
#1: No utilizar un trípode
Por falta de costumbre o incomodidad al trasladarlo, puedes «olvidarte» el trípode y pretender tomar tus fotografías de paisajes sin este accesorio que es primordial. Lo único que lograrás si no llevas el trípode contigo es fotografías movidas o trepidadas, (y muy probablemente, fuera de foco).
El trípode es un elemento clave y esencial en la fotografía de paisajes, así que trata de amigarte con él y llevarlo a todos lados contigo y tu equipo fotográfico. Puede que al principio te moleste trasladarlo ya que es un accesorio algo pesado y robusto, pero créeme que una vez que has tomado la costumbre de llevarlo contigo y que te des cuenta que tus fotografías no serán lo mismo sin él, acabarás por entender que debe formar parte de tu equipo fotográfico de paisajes.
#2: Adquirir objetivos y accesorios fotográficos de dudosa calidad
Cuando comienzas a introducirte en el mundo de la fotografía de paisajes es muy probable que, al poco tiempo, descubras que hay un sinfín de objetivos (y accesorios fotográficos más que nada), que pueden hacer de tus fotografías algo espectacular. Y aquí es cuando más tienes que controlarte, pues no necesariamente necesitas tener todos los accesorios del mercado para tomar fotografías alucinantes. Puedes comenzar por fotografiar con un equipo básico (cámara, objetivo, baterías, memorias y trípode), y luego leer, investigar, leer la opinión sobre otros fotógrafos sobre determinados accesorios y luego adquirir uno de ellos para sacar tus propias conclusiones. Recuerda que quien paga mal, paga dos veces.
Si compras un objetivo, filtros o incluso un trípode de calidad y procedencia dudosa, dicha pérdida se trasladará directamente a tus fotos. Las cámaras se renuevan constantemente, pero un buen objetivo, un filtro de buena calidad o un trípode fuerte, te acompañarán toda la vida. Intenta no caer en la trampa de las marcas, y si no sabes en qué invertir, si en la cámara o en un buen objetivo, opta por un buen objetivo.
#3: Enfocar al infinito
Si tienes alguna noción sobre la fotografía de paisajes, seguramente sabrás que siempre es tentador enfocar al infinito, en busca de que la fotografía de ese alucinante paisaje que tienes en frente salga lo más nítido posible. Pero ten cuidado, ya que esto no siempre es lo más recomendable a la hora de lograr fotografías de gran calidad.
Si sólo enfocas al infinito estarás desperdiciando una gran porción de profundidad de campo y te verás obligado a utilizar diafragmas muy cerrados provocando que toda la fotografía pierda nitidez, y en consecuencia, calidad.
Recuerda que los objetivos alcanzan su mejor rendimiento con aperturas intermedias (f/8 o f/11 por ejemplo), por lo que utilizar aperturas muy abiertas o muy cerradas restarán calidad a las fotografías.
Si utilizando aperturas intermedias aún no logras que toda la fotografía salga perfectamente nítida, puedes utilizar estas dos técnicas:
- Hiperfocal: consiste en conocer la distancia a la cual tu cámara enfocará todo el cuadro de manera nítida de acuerdo a la distancia focal que utilices y a la apertura de diafragma que elijas. A partir del punto hiperfocal, todo saldrá en foco.
- Bracketing: consiste en tomar varias fotografías de una misma escena variando el foco en cada una de ellas para luego, en el ordenador y mediante un software (Ej. Photomatix, Photoshop), unificar todas las tomas y lograr una fotografía con una profundidad de campo asombrosa.
#4: Imágenes movidas o trepidadas
Utilizar diafragmas más cerrados con el fin de obtener mayor profundidad de campo y que todo en la escena salga nítido, implica o bien aumentar la sensibilidad ISO o bien reducir la velocidad de obturación de modo de lograr una buena exposición.
Pero, como bien sabrás, aumentar la sensibilidad ISO no es gratis: aumenta la cantidad de ruido o grano en tus fotografías y en consiguiente, reduce la nitidez y calidad de la imagen, algo fundamental en la fotografía de paisaje.
Disminuir la velocidad de obturación también tiene su costo: la probabilidad de que la fotografía salga movida perdiendo nitidez, aunque disminuir el riesgo de trepidación como he mencionado arriba es más sencillo: nunca olvides utilizar el trípode.
En casos extremos donde requieras trabajar con velocidades de obturación muy lentas, con un trípode no será suficiente. Ten a mano un disparador remoto o configura tu cámara en modo disparo retardado y levanta el espejo: utiliza la pantalla como visor de modo de evitar vibraciones indeseadas.
#5: Desaprovechar el amanecer y el atardecer
Al comienzo de tu carrera como fotógrafo de paisajes puede que no cuentes con todo el equipo necesario para poder realizar tus fotografías en condiciones de escasa luz, por lo que te verás limitado a situaciones en donde la luz te sea favorable. Esto puede traer como consecuencia que tus fotografías de paisajes se vuelvan algo monótonas a causa de la iluminación.
Aquí debes probar madrugar y salir a hacer tus fotografías ni bien amanece o bien, esperar al atardecer y hacer tus fotografías con la puesta del sol. Notarás que estos dos momentos son excelentes para realizar tus fotografías ya que, gracias la posición del sol, la luz incide sobre la escena lateralmente, creando texturas, sombras y patrones muy atractivos que harán que tus fotografías de paisajes sean mucho más expresivas.
#6: No aprovechar al máximo una ubicación
A excepción de que organices un viaje fotográfico, es muy probable que no dispongas del tiempo necesario para poder explotar al máximo las posibilidades que te brinda una determinada locación, más aún si te has topado con el paisaje en un viaje en vez de haberlo planificado.
Si no le dedicas el suficiente tiempo a analizar la escena y evaluar todas las posibilidades que esta te ofrece, al momento de encuadrar la fotografía, es poco probable que logres cubrir todos los posibles encuadres.
Seguro en más de una ocasión te has quedado con la sensación de que no has logrado las fotografías que hubieras querido. Lamentablemente, si luego de fotografiar un atardecer no estás conforme con el resultado, para volver a tener el sol en la misma posición y poder corregir el encuadre deberás, o bien acampar y esperar al próximo día, o bien volver en otra ocasión ya con una idea más formada de cuál es el resultado que esperas obtener en tu fotografía y esto no siempre es posible.
Por eso, cuando te topes con un paisaje digno se ser retratado, no te apresures, tómate tu tiempo para evaluar todas las posibilidades que éste te ofrece, los elementos compositivos que puedas incluir en la fotografía, los ángulos de donde realizar las tomas, etc. Cuando más trabajes en la escena, mejores resultados obtendrás con tus fotografías. Pocas cosas te frustrarán más que abandonar un lugar sabiendo que no lo has podido aprovechar al máximo.
#7: Contrastes excesivos
Tu ojo es capaz de percibir detalles en situaciones en donde a tu cámara no le es posible. Una de estas situaciones es cuando se presentan escenas altamente contrastadas, es decir, cuando la diferencia entre las luces y las sombras es muy grande.
En estas situaciones, se vuelve realmente complicado que puedas obtener detalles en ambas al mismo tiempo, luces y sombras, por lo que deberás elegir con cuál de ellas te quedas y ajustar los parámetros de la toma para la elegida.
La capacidad de tu cámara para captar detalles en las luces como en las sombras, se conoce como «rango dinámico”. Para poder aprovechar al máximo toda la capacidad del sensor de tu cámara para captar esa información, debes realizar una correcta exposición. De esta manera, lograrás obtener la mayor cantidad de tonos claros y oscuros al mismo tiempo en una sola fotografía.
Pero, ¿Cómo hacerlo correctamente? La clave está en configurar los ajustes de la toma para que los objetos más claros que aparecen en la escena no queden sobre-expuestos, es decir, totalmente blancos y sin detalle. De esta manera te asegurarás que tu cámara está captando la mayor cantidad de tonos claros posibles y al mismo tiempo, obtendrás mayor detalle en los oscuros.
#8: La falta de protagonistas
Es muy común que en las fotografías de paisaje, los objetos principales aparezcan muy lejos, haciendo que se pierdan en el resto del paisaje como un elemento más dentro del mismo.
Y el tema aquí es que el paisaje puede ser alucinante pero no puede ser protagonista todo el paisaje. Toda foto paisajística exitosa contiene algún elemento protagonista, algo en lo que la gente consciente o inconscientemente se fijan al mirar la foto, un objeto de interés.
Puedes intentar utilizar árboles, ríos, rocas, caminos, y cualquier otro elemento que sea atractivo para ayudar a dirigir la mirada del observador y le den “sensación de lugar”, es decir, que se sientan dentro de la fotografía y los inviten a sumergirse en ella.
De modo que no todo tiene que estar siempre a cientos de metros del objetivo, procura acercarte y utilizar los elementos del paisaje para potenciar el primer plano y lograr así fotografías más expresivas.
Puedes probar incluyendo personas también dentro de la foto. Explota tu creatividad al máximo e incorpora a tus paisajes el factor humano.
#9: Fondos que carecen de interés
En la mayoría de fotografías de paisajes que puedes encontrar en Internet, el fondo seguro es el protagonista de la escena. Este tipo de fotografías no generan demasiado interés para el espectador a no ser que el paisaje sea tan espectacular que, por sí mismo, deje a todos atónitos.
En las distintas locaciones en donde vayas a realizar tus fotografías de paisaje, presta mucha atención al fondo de las mismas ya que en la fotografía de paisaje, el fondo importa y mucho. Recuerda que en este tipo de fotografías la nitidez es fundamental y toda la escena debe poder distinguirse claramente. Conseguir fondos atractivos resultara clave para que tus fotografías logren el impacto que deseas.
#10: Utilizar modos de toma inadecuados
Es muy probable que, si eres principiante, te veas tentado a utilizar los modos predefinidos de cámara para tus fotografías, en este caso: el modo paisaje. Puede que te resulte fácil y rápido, pero ¿Cuál es la gracia si dejas que la cámara decida todo por ti?
Este modo, cierra el diafragma para ganar profundidad de campo (nitidez) y compensa la “pérdida de luz” producto de cerrarlo, disminuyendo la velocidad de obturación para obtener una correcta exposición.
En consecuencia, la cámara realiza la medición de la “cantidad de luz” del ambiente automáticamente, y lo que hace es calcular un promedio entre los tonos más claros y más oscuros (luces y sombras) lo que produce que no capte toda la información que el sensor de tu cámara es capaz de captar, perdiendo detalles en los extremos (tonos más claros y más oscuros).
Y lo más importante: ¿Por qué dejar que una máquina tome decisiones que tranquilamente puedes tomar tú? Lo importante aquí son tus conocimientos y tu ojo creativo, recuerda que la cámara es sólo un instrumento para que puedas plasmar todo eso en una fotografía.
Espero que el artículo de hoy haya sido de tu interés, que consigas unos zapatos cómodos y te lances a la aventura de ser un fotógrafo de paisajes alucinante. Estaré leyendo tus comentarios para saber qué te gustaría aprender y darte mis mejores consejos fotográficos y te esperaré también en mis redes sociales Facebook, Pinterest e Instagram para que estemos siempre en contacto.
Sumamente interesante tus enseñanzas, pues agradezco tu gentileza.