La práctica de la atención plena, también conocida como mindfulness, puede ser extremadamente beneficiosa para un fotógrafo en varios aspectos que veremos a continuación. Pero primero comprendamos a qué nos referimos cuando hablamos de atención plena…
La atención plena, o mindfulness, es la práctica de estar conscientemente presente en el momento actual, sin juzgar lo que está sucediendo. Se trata de enfocar la atención a alguno de tus 5 sentidos (o más de uno en simultaneo), para percibir la realidad de lo que está sucediendo en ese momento (especialmente a través de ese sentido -visual, sonoro, gustativo, olfativo o sensorial-).
Es posible practicarlo de manera sencilla al prestar especial atención a uno o varios de nuestros sentidos a la vez. Por ejemplo, poniendo todo el foco de atención en nuestro sentido auditivo, puedes concentrarte un momento prolongado en los ruidos de tu entorno. Con el correr de los minutos comenzarás a escuchar nuevos sonidos, algunos lejanos, otros cercanos, algunos que no escuchabas antes, como el ruido de un reloj, un perro ladrando a la distancia, el motor de una heladera, etc.
Así, logras intensificar la experiencia de lo que está sucediendo a través de lo que escuchas.
Pero no solo eso, en ese momento de atención plena en tu escucha, se reduce la actividad mental, con lo cual tambien se reducen las preocupaciones de tu mente, es decir, pensamientos varios que puedes estar teniendo en ese momento. Generalmente pensamientos que tienen que ver con preocupaciones del pasado o expectativas sobre el futuro.
Es así que, si realmente te concentras en lo que escuchas, lo más probable es que logres despojarte de cualquier pensamiento intrusivo por un momento. Y en ese momento es cuando podrás conectarte con todo lo que escuchas a tu alrededor de manera más aguda e intensa.
Y esto puede pasar con cualquiera de tus sentidos. Imagina cuando practicas la atención plena con tu sentido de la vista, de repente sientes que comienzas a ver cosas que antes no veías (no prestabas atención). ¿Y con el sentido del gusto te lo imaginas?
La atención plena es un método para intensificar la experiencia visual, auditiva, olfativa, gustativa y sensorial.
¿Entonces, como puede un fotógrafo beneficiarse y sacar provecho de esta práctica?
La atención plena te ayuda a estar más presente en el momento y a observar tu entorno con mayor claridad. Esto puede permitirte capturar detalles y momentos que de otro modo podrían pasar desapercibidos en situaciones cotidianas.
Ella puede desbloquear tu creatividad al permitirte ver el mundo desde nuevas perspectivas y explorar ideas frescas. Aún cuando te encuentres en un entorno conocido y rutinario.
La atención plena tambien puede ayudarte a gestionar el estrés, la frustración y otros sentimientos negativos que a veces surgen previamente, o durante, la salida o sesión fotográfica. Al estar totalmente e intencionadamente concentrado en tu observación, escucha, o en lo que sientes (el aire fresco de la mañana tocando tus mejillas por ejemplo…) no darás lugar a pensamientos negativos sobre tu momento presente, con lo cual podras mantener la calma y vivir la experiencia sin tanto juicio negativo. La práctica de la atención plena te ayuda a reducir la distracción mental y a estar más enfocado en la tarea en cuestión.
Al ser consciente de tu entorno y de los elementos presentes en la escena, puedes tomar decisiones de composición más efectivas. Esto te permitirá crear imágenes equilibradas y atractivas desde el punto de vista visual. Muchas veces nos apuramos para disparar y en ningun momento nos detuvimos a contemplar la escena.
Si estás fotografiando personas, la atención plena puede ayudarte a establecer una conexión más profunda con las personas. Al tu mismo estar presente y enfocado en ellos, serás capaz de percibir como se sienten, lo que les incomoda y lo que les gusta, para luego usarlo a tu favor y capturar momentos genuinos y armoniosos.
En definitiva la atención plena fomenta la aceptación y la observación sin juicio. Esta es una cualidad fundamental para tu desarrollo y aprendizaje como fotógrafo al permitirte expandir tu creatividad y curiosidad. Y al mismo tiempo, disminuir la ansiedad y frustración que a menudo aparece cuando sientes que no sabes todo lo que te gustaría saber.
Es muy necesario aclarar que esta práctica es sencilla de llevar en la práctica, cualquiera puede hacerlo y te voy a dejar un ejercicio por si lo quieres intentar al final. Pero tambien debes saber que conlleva esfuerzo de voluntad, realmente debes tener intención de llevarlo a la práctica en cada momento para lograr un resultado notorio. Y esto se mejora con la práctica constante.
Mi intención en este breve articulo es darte una introducción para que conozcas como puede la atención plena ayudarte en tu desarrollo como fotógrafo. Si estas interesado en esto no dudes en buscar cursos y talleres de mindfulness en tu ciudad, es una practica muy utilizada hoy en día y sus beneficios son comprobados.
Aquí tienes un ejemplo de cómo aplicar la atención plena utilizando el sentido de la vista:
Encuentra un lugar tranquilo y cómodo para sentarte. Puedes estar en el interior o al aire libre. Una vez que estés listo, sigue estos pasos:
- Encuentra un lugar tranquilo y cómodo para sentarte. Puedes estar en interiores o al aire libre.
- Observa tu entorno: Empieza por mirar a tu alrededor. No te enfoques en ningún detalle específico por ahora, simplemente observa el panorama general.
- Detén el juicio: Si notas que tu mente empieza a juzgar o etiquetar lo que ves (por ejemplo, «esto es bonito», «esto es feo»), reconoce esos pensamientos y suéltalos suavemente. Vuelve tu atención a la observación pura.
- Detalles y texturas: Ahora, dirige tu mirada hacia un objeto cercano. Puede ser una planta, una piedra, una hoja o cualquier otro elemento. Examina sus detalles y texturas con una mirada curiosa. Observa los colores, las formas y cualquier pequeño rasgo que normalmente podrías pasar por alto.
- Tiempo: No estés apurado al realizar esta practica. Si estas pensando que debes irte o que tienes algo que hacer, será complicado concentrarte.
- Cambios en la luz: Si estás al aire libre, presta atención a cómo la luz del sol interactúa con los objetos. Observa cómo cambian las sombras y los reflejos a medida que el sol se desplaza por el cielo.
- Respira: A medida que observas, acompaña tu atención con respiraciones conscientes. Inhala y exhala suavemente mientras continúas mirando el objeto. Esto te ayudará a mantener tu enfoque y a estar completamente presente en el acto de observar.
- Explora otros objetos: Después de unos minutos, cambia tu atención a otro objeto cercano. Repite el proceso de observación detallada y consciente.
- Registra tus sensaciones: Una vez que hayas terminado tu práctica de observación, reflexiona sobre tus sensaciones y observaciones. ¿Notaste detalles que normalmente no habrías visto? ¿Cómo te sentiste al dedicar tiempo a observar con atención?
Este ejercicio utiliza el sentido de la vista para anclarte en el momento presente y fomentar la observación consciente. Puedes realizar prácticas similares mientras estás fotografiando, prestando atención a los detalles y matices que a menudo pasan desapercibidos.
En resumen, la práctica de la atención plena puede ayudarte a mejorar tu observación, creatividad, y conexión con el entorno para descubrir nuevas perspectivas, historias a transmitir, ángulos y objetos a fotografiar, así como tambien reducir la frustración y aumentar el disfrute en tus salidas o sesiones fotográficas.
Por ahora lo dejo aquí, no obstante me interesa saber si este tipo de contenido te sirve, o te ha sido útil, así como también cual es tu experiencia al respecto. Deja tu comentario debajo y comparte tu punto de vista con todos los lectores!
SUPER CONSEJO, MIL GRACIAS